Plantas trepadoras: todos sus secretos para simplificar tu vida
Las plantas trepadoras son la mejor opción para dar un look salvaje tanto a tus interiores como exteriores. Sus bonitas y coloridas hojas trepan y caen por muebles, paredes, pérgolas y porches, creando escenas únicas. Te descubrimos las variedades de enredaderas ideales, así como sus cuidados y ubicaciones en casa para que no te líes al momento de decorar con plantas. ¡Caerás en sus redes!
Las plantas trepadoras son la mejor opción para dar un look salvaje tanto a tus interiores como exteriores. Sus bonitas y coloridas hojas trepan y caen por muebles, paredes, pérgolas y porches, creando escenas únicas. Te descubrimos las variedades de enredaderas ideales, así como sus cuidados y ubicaciones en casa para que no te líes al momento de decorar con plantas. ¡Caerás en sus redes!
Tipos de plantas trepadoras para decorar la casa
Como suele pasar en el mundo de las plantas, existe una gran variedad de trepadoras que podemos escoger. Hemos hecho una selección de las 10 especies más vistosas y fáciles de mantener en el ámbito doméstico, para que elijas las que más te gusten por su aspecto y se adapten mejor a tu terreno:
La hiedra
Es una de las enredaderas más habituales en jardines y terrazas, dado su fácil mantenimiento. Entra dentro de la categoría de plantas trepadoras de crecimiento rápido, ya que puede avanzar de 10 a 20 cm por año. El sol la ayuda a crecer, sí, pero ten presente que necesita sombra para que sus hojas luzcan en su esplendor y no se quemen. En verano, riega la hiedra tres veces por semana para paliar el calor. El resto del año bastará con una vez cada 7 días. Aunque queda genial en fachadas, también puedes ponerla en interiores, sobre un estante. Si la dejas crecer en una superficie horizontal, puede llegar a extenderse entre 4 metros y medio de largo por 20 centímetros de alto. Pero si la superficie es vertical, la hiedra puede alcanzar más de 15 metros.
Consejo Westwing: si la usas como planta de interior, no la riegues en exceso. Mejor pulveriza agua por encima 3 veces por semana.
El potus
Es otra de las plantas trepadoras más común en casas. En un macetero en el suelo o colgante, sus hojas crecen haciendo un hipnótico efecto cascada. Destaca por su resistencia y cuidado fácil. Solo se tiene que regar abundantemente una vez cada dos semanas, dejando la tierra bien húmeda.
El ficus trepador
Es capaz de cubrir una pared entera en poco tiempo. Solo necesita suficiente luz solar y una temperatura de unos 20ºC para expandirse a sus anchas. Cuando lo riegues, pulveriza agua también por sus hojas. Es ideal para darle un aspecto rústico a las fachadas.
La buganvilla
Es una de las plantas trepadoras con flor más populares. Su frondosidad y bellas flores rosas fucsia invaden porches en todo tipo de climas. Si tu casa está situada en una zona cálida, la tendrás que podar durante los meses más fríos. Si vives en un área húmeda y fresca, pódala en primavera. Así potenciarás su crecimiento, que puede alcanzar los 10 metros de altura.
La glicina
Este es otro caso de plantas trepadoras con flor, en esta ocasión en tonos violetas y malvas. Como plus, esta especie ofrece un aroma dulce allí donde esté. Plántala lo más profundo que puedas porque sus raíces tienden a ramificarse mucho y necesitan espacio. Pódala en otoño, primavera y verano, las estaciones en que más crece. Precisa un riego constante, unas 2 ó 3 veces por semana.
El jazmín
Esta trepadora es la reina de los jardines y las terrazas, sobre todo en verano, cuando más huele, ya que sus flores salen de mayo a septiembre. Con el calor, deberás regar tu jazmín cada dos días. Cuando haga frío, solo una vez por semana. Si pones una planta de jazmín en los interiores, hará de ambientador natural.
Madreselva
Puede encontrarse en versión arbusto o en trepadora. En este último caso requerirá mucha luz solar indirecta. Colócala en el interior de una pérgola o porche, para que tenga cierta sombra. La madreselva puede crecer entre 2 y 3 metros y florece en primavera-verano. Cuando pierda las flores, aprovecha a podarla.
El rosal trepador
De tallos espinosos, fuertes y leñosos, suelen alcanzar una altura aproximada de 5 metros, aunque algunas variedades pueden llegar hasta cerca de los 20 metros de altura. Además de ser una variedad muy decorativa, su olor es otra de sus grandes bazas. Necesitan de una luz solar controlada (máximo 4 horas al día), abundante riego (en verano, al menos 4 veces por semana) y abonarlos cuando empiece el calor.
Dama de noche
Es un tipo de planta ideal para porches, de fragancia intensa, que puede alcanzar los 5 metros de altitud. No soporta bien las heladas y precisa de un suelo bien drenado. Si deseas una buena floración es importante aportar hierro mediante fertilizantes. En cuanto al riego, en los meses calurosos, cada dos días y en el resto de los meses dos veces a la semana. Si al riego le añades fertilizante para cactus, te lo agradecerá.
La parra
Esta planta trepadora mediterránea en esencia requiere paciencia, ya que puede tardar en crecer casi 4 años desde que se planta. Se tiene que podar un par de veces al año, cuando las ramas pierdan sus hojas.
Consejo Westwing: cuando aparezcan las uvas, cubre los racimos con bolsas de papel para protegerlos de los bichos.
Otras especies de plantas trepadoras menos conocidas, pero igualmente decorativas son: la plectranthus Australis, la trompeta trepadora o la ceropegia Woodii.
Diferencia entre plantas trepadoras y enredaderas
La diferencia entre los dos tipos de plantas radica en la forma de trepar. Las plantas trepadoras son aquellas cuyas raíces y ramas se adhieren de forma natural subiendo por paredes, columnas o superficies verticales. Mientras que las trepadoras necesitan un soporte y una guía para que sus largos tallos recorran celosías o verjas.
Cómo decorar con plantas trepadoras
De seguro que ya te imaginas poniendo plantas trepadoras en la decoración de tu casa, pero es bueno que antes de ponernos manos a la obra sepamos la diferencia en cuidado y manejo de estas plantas de acuerdo con la estancia donde vivirán.
En exteriores
Su ubicación más vista es en paredes exteriores de casas. Es aquí donde poseen múltiples ventajas y no solo decorativas. En épocas de lluvia y frío, las plantas trepadoras son un aislante natural para la casa, manteniendo el calor. En verano, ofrecen un ambiente fresco y libre de humedad. Puedes pensar que por ser una planta adosada a la pared puede crear moho y humedades, pero es todo lo contrario: mantiene el muro de una forma natural libre de humedad, ya que la planta la absorbe.
En exteriores, como jardines, terrazas y patios, pueden ser el mejor recurso para darle vida a una de sus paredes. También son perfectas para dar sombra en una pérgola o porche.
En interiores
El Feng Shui recomienda el uso de plantas trepadoras en interiores por su capacidad de regenerar la energía y porque están consideradas una especie de plantas que da suerte.
Si tienes un rincón soso, que quieras destacar, pon una planta trepadora sobre una cómoda, la consola del recibidor, encima de un armario o vitrina, o en un estante. Con ellas puedes crear un ambiente primaveral en el rincón de lectura, incluso en la cocina.
Estas especies quedan genial como plantas colgantes, ya que sus hojas caen de manera natural, aportando un toque salvaje al cuarto de baño, por ejemplo.
Como has podido ver, las plantas trepadoras cuentan con más beneficios de los que imaginabas. Apuesta por ellas en tu decoración y verás como tu casa adquiere un aspecto más natural.