La colocación de los cubiertos en la mesa no solo responde a una cuestión estética, sino que es esencialmente práctica. Aunque la palabra ‘protocolo’ te suene grandilocuente, seguir sus pautas a la hora de poner la mesa en una ocasión especial o familiar ayudará a tener una comida más organizada, cómoda y ágil. Estas son las normas básicas de cómo poner cubiertos en la mesa correctamente.

Cómo poner cubiertos en la mesa según protcolo

Antes de entrar en faena, no está de más recordar algunos trucos para preparar una mesa fantástica. Como base, la mantelería vestirá la superficie y es clave para dar con el look deseado.

Si es una comida informal, puedes optar por bonitos individuales o caminos de mesa, mientras que si es una cena más elegante, siempre opta por manteles que cubran toda la mesa, en colores neutros para la temporada fría y más alegres o estampados para primavera-verano. Complétala con ingeniosas soluciones para doblar servilletas, de tela a conjunto o de papel si la reunión es más desenfadada (las hay de muy buena calidad y con diseños sofisticados).  

En cuanto a la vajilla, pon primero los bajoplatos, piezas que evitan manchas indeseadas en el mantel. Después el resto de platos, en el orden que se vayan a usar, uno encima del otro.  

Llega el momento de la cristalería. Los vasos y las copas se colocan en la parte superior derecha del plato, entre las 12h y la 1h (si el plato fuera un reloj). El vaso para el agua a la izquierda y luego el vaso de vino. Si vas a tomar cava, sirve mejor las copas a la hora del brindis; así no llenarás demasiado la mesa y evitarás accidentes y choques indeseados.  

Por último, la decoración de la mesa debe centrarse en el centro (valga la redundancia). Un ramo de flores silvestres, ramas de eucalipto y algunas velas, pero siendo comedidos para que el conjunto respire y sea apetitoso.  


El momento de los cubiertos 

¿Cómo poner los cubiertos en la mesa? Pues sigue estos 4 sencillos pasos: 

  1. Coloca los tenedores a la izquierda

    En el caso de tener que colocar varios tenedores, el que está más cerca del plato es el último que usaremos, así que si vas a comer una ensalada como entrante y luego carne, éste último será el que está más cerca del plato. En esto de cómo colocar los cubiertos en la mesa correctamente hay una norma básica: de afuera hacia adentro. 

  2. Pon los cuchillos a la derecha del plato

    Para disponer el cuchillo en su sitio, el filo debe mirar hacia el plato y si hay varios tipos, se ubican en el mismo orden que los tenedores, con la regla universal del “de fuera hacia adentro”. 

  3. Cucharas a la derecha del plato y de los cuchillos

    Las cucharas se colocan en la parte derecha del plato y a la derecha de los cuchillos con la concavidad hacia arriba. En definitiva, será el cubierto más alejado del plato. 

  4. Coloca los cubiertos de postre en la parte superior del plato

    Para los cubiertos de postre, tienes dos opciones: si no hay demasiado espacio en la mesa puedes, traerlos cuando sirvas el postre. Si decides colocarlos desde un principio, se ponen en la parte superior del plato, a sus 12h. Recuerda que la cuchara y el cuchillo se colocan con el mango hacia la derecha y el tenedor con el mango hacia la izquierda. 

Consejo: Los cubiertos se colocan a 3 ó 4 centímetros de distancia a cada lado del plato. 


¿Qué estilo de cubiertos escojo? 

Modernos con diseños estilizados. Clásicos, con empuñaduras troqueladas o con cenefas. En dorado, tipo vintage. O con empuñaduras de madera natural, para comidas más casual. La imagen de tu cubertería dirá mucho del tipo de comida que estás llevando a cabo, más elegante o de diario. Por algo son elementos imprescindibles del menaje del hogar.  


¿Cuántas piezas debe tener mi cubertería? 

Las piezas básicas con las que debería contar una cubertería completa son: cuchillos de mesa, que puedan servir también para cortar carne, tenedores, cucharas soperas, cucharillas y tenedores de postre, cacillo para servir sopa, cremas o legumbres, cucharón especial para ensalada, cuchillo y tenedor de trinchar y cucharitas para el café o el té (de moka), que son de un tamaño menor que las cucharillas de postre. 

Los juegos básicos son de 12 piezas de cada tipo de cubierto. Las cuberterías más completas pueden llegar de las 114 a las 150 piezas, aunque si no eres de grandes celebraciones en casa, quizás sea excesivo.  


¿Qué materiales son los más adecuados para mis cubiertos? 

Existen distintas opciones para los cubiertos. Las más utilizadas:

  • Acero inoxidable: Lo más habituales por resistencia, calidad y diseño. Sirven tanto de diario como para ocasiones más festivas y se pueden meter en el lavavajillas sin problema. Ten en cuenta que hay aceros de muy diferentes calidades y que el acero inoxidable 18/10 es el más adecuado.
  • Plata: Suelen reproducir modelos clásicos y cada cubierto viene con el correspondiente sello de garantía. Un tesoro que se transmite de generación en generación. Las cuberterías de plata se ennegrecen si no se usan, así que de vez en cuando se tienen que limpiar, pieza a pieza, con productos adecuados para un correcto mantenimiento.
  • Aleaciones: Fabricadas con una aleación de cobre y zinc bañada en plata, son la versión low cost de las de plata de ley. Otra opción más económica aún, son las bañadas en plata.
  • Cuberterías mixtas: Madera, plástico, nácar… Normalmente se presentan en kits con los cubiertos básicos (para 6 o 12 comensales), aunque otras veces se pueden comprar sueltos. Muchos de estos materiales no se pueden introducir en el lavavajillas. La madera, por ejemplo, pierde brillo y se reseca con las altas temperaturas, mientras que el plástico puede llegar a despegarse.

Sabías que… los cubiertos dicen mucho

Tienen un lenguaje propio mediante el cual comunicarás una cosa u otra, según su disposición en el plato. Colocando el tenedor y el cuchillo formando un triángulo sin baso, y sin que se toquen en la punta del todo, indicas que estás haciendo una pausa. 

Colocándolos en forma de cruz, con las púas del tenedor en vertical y el cuchillo en horizontal, quiere decir que has finalizado el primer plato. 

Si ambos están horizontales con el mango hacia la derecha, indicas que has terminado el segundo plato. 

Si quieres decir que te ha gustado mucho el plato, colócalos paralelos y en vertical. En cambio, si no te ha gustado vuelve a formar una V invertida, pero esta vez los extremos de los cubiertos sí se deben tocar.