habitaciones de bebé originales

Cuando esperamos la llegada de nuestro bebé, imaginamos cómo montaremos su habitación con todo lujo de detalles. Queremos la mejor cama, el mejor espacio para guardar su ropa, una butaca para sentarnos a leerle cuentos, un tipi para que se esconda cuando empiece a corretear, una zona de juegos con tobogán si hace falta… Pero luego llega el baño de realidad: nos faltan metros. ¡No pasa nada! Las habitaciones de bebé pequeñas pueden ser tan bonitas como las grandes. Incluso más monas si cabe. Solo necesitamos elegir muy bien las piezas necesarias y tener en cuenta algunos truquillos para hacer que el espacio parezca más grande de lo que realmente es. ¿Los vemos? Sigue con nosotros y consigue una habitación para tu bebé adorable.

Los muebles imprescindibles

Si quieres que la habitación de tu bebé no se vea más pequeña de lo que es, tienes que minimizar el mobiliario. Y no es una mala noticia. Los bebés no necesitan grandes muebles durante los primeros años. Hay unas piezas básicas que, por supuesto, debes tener, pero más allá de esto, nada es imprescindible. ¿Cuáles son los must para habitaciones de bebé pequeñas?

  1. La cuna: lo que debes tener en cuenta es que cumpla todas las medidas de seguridad que se requieren. Y si es una minicuna, una cuna de barrotes o una cuna convertible, tendrá que ver con el espacio y el aprovechamiento que quieras darle a la pieza.
  2. La cómoda-cambiador: dependiendo del espacio que tengas, puedes optar por instalar una cómoda y un cambiador o bien hacer un dos en uno, colocando una colchoneta cambiador sobre una cómoda. Cuando son pequeños, los niños no necesitan grandes armarios para su ropa. Basta con unos cajones, donde cabrá todo doblado y lo encontrarás a primer golpe de vista. Y puedes elegir una cajonera alta y estrecha en vez de más ancha, que ocupará más espacio de pared.
  3. Conjuntos compactos: otra solución cuando falta el espacio es optar por muebles compactos que cuentan con cuna convertible en cama, cambiador y cajoneras para guardar la ropa. Son voluminosos pero con una sola pieza, tienes solucionadas todas las necesidades que te surgirán con un bebé.

Consejo: Si tienes espacio, también estaría bien que contaras con un sillón de lactancia. Y si quieres sí o sí un armario, opta por uno con puertas de cristal o bien del mismo color que la pared, lisas y sin tiradores para que sea lo más ligero posible.

Los colores perfectos para habitaciones de bebé pequeñas

Conocemos el poder del color. Puede provocar emociones, modificar la sensación térmica del lugar e incluso cambiar la percepción del tamaño y la luz del espacio. Siendo así, está más que claro que debemos utilizar el color para ayudarnos a ganar amplitud. ¿Cuáles son los colores ideales, entonces, para habitaciones de bebé pequeñas

  • Blanco: es el color mágico de la luz y el espacio. Una habitación de bebé pintada de blanco parecerá no solo más grande y luminosa –es el color que refleja mejor la luz–, sino también más limpia, y además, no pasará de moda. Es el color eterno.
  • Gris claro o azul claro grisáceo: son los nuevos beige. Colores envolventes y luminosos que consiguen un espacio confortable y más amplio de lo que realmente es.
  • Beige: los tonos tostados claros son también ideales para pintar habitaciones de bebé pequeñas. Aportan luminosidad a la vez que resultan cálidos.

Consejo: También en las habitaciones de bebé pequeñas es una buena idea optar por el papel pintado, pero solo en una pared. Una pared empapelada dará profundidad a la estancia a la vez que la decorará sin llenar el espacio.

Distribuye para ganar luz y metros

Lo ideal es que la habitación de tu bebé tenga luz natural. Si es así, distribuye los muebles para que no interfieran la entrada de luz porque cuanta más tenga, más grande se verá el espacio. Por otro lado, intenta colocarlo todo de tal manera que los pasos sean fluidos. Necesitarás comodidad para moverte con tu bebé en brazos. Y evita colgar cortinas demasiado tupidas.

Un truco si tienes cortinas: instala una barra más larga que la ventana y deja que las cortinas cuelguen a ambos lados de la ventana tapando la pared. Dejarán toda la superficie de cristal libre y ópticamente, parecerá que la ventana es más grande de lo que realmente es.

Adornos: pocos y bien elegidos

Cuando nos enfrentamos a decorar habitaciones infantiles pequeñas no es una buena idea llenarlas de detalles de mil colores distintos. Por muy monos que sean, llenan el espacio y hacen que se perciba caótico y con ello, más pequeño. Lo ideal es ser muy selectivo con los detalles decorativos y elegirlos en una misma gama de colores: esta sobriedad nos hará ver el espacio más sereno y ordenado, y de rebote, más amplio.

Esperamos haberte dado buenas soluciones para decorar habitaciones de bebé pequeñas y te invitamos a continuar navegando por WestwingNow y descubrir mil detalles que te inspirarán para crear ese mundo único que deseas tengas los metros que tengas.

Adornos para la habitación del bebé