Salón rústico: 10 trucos e ideas para decorarlo
Tienen encanto y mucho. Los muebles de madera oscura, texturas naturales, tonos cálidos y la chimenea de un salón rústico, hacen que te transportes a una cabaña en plena naturaleza y que te sientas como en casa. Los salones siempre son aquellos centros neurálgicos de todo hogar, en ellos socializamos y nos reunimos con familia y amigos. ¿Qué mejor estilo que aporte ese toque acogedor y confortable a tu salón que el rústico? Si te gustaría dar un aire campestre y hogareño a tu salón, en este artículo te mostramos distintos trucos y claves para conseguir el resultado que buscas y volver a enamorarte de tu salón.
Contenido
- 1. Utiliza materiales naturales y sencillos
- 2. Madera, madera y más madera
- 3. Escoge un sofá que invite a pasar horas en él
- 4. Añade alfombras para ese efecto “cozy”
- 5. Escoge piezas artesanales
- 6. Respeta los elementos arquitectónicos
- 7. Detalles si, pero sin recargar
- 8. Los mejores colores para un salón rústico
- 9. La piedra o la madera para vestir las paredes y techos
- 10. La chimenea como foco principal de salones rústicos
Tienen encanto y mucho. Los muebles de madera oscura, texturas naturales, tonos cálidos y la chimenea de un salón rústico, hacen que te transportes a una cabaña en plena naturaleza y que te sientas como en casa. Los salones siempre son aquellos centros neurálgicos de todo hogar, en ellos socializamos y nos reunimos con familia y amigos. ¿Qué mejor estilo que aporte ese toque acogedor y confortable a tu salón que el rústico? Si te gustaría dar un aire campestre y hogareño a tu salón, en este artículo te mostramos distintos trucos y claves para conseguir el resultado que buscas y volver a enamorarte de tu salón.
1. Utiliza materiales naturales y sencillos
No es casualidad que el estilo rústico sea de los favoritos para muchos interioristas, sus elementos naturales y su sencillez te permiten tener un hogar lleno de paz y armonía. ¿Cómo crear una decoración de un salón rústico con mucha personalidad y estilo? ¡Te damos los mejores trucos!:
Apuesta por la combinación de texturas. No podrán faltar el mimbre, las telas de lino, lana o algodón, piezas de barro y cerámica, paredes de piedra, muebles de madera sin tratar…
2. Madera, madera y más madera
La madera es la protagonista de este estilo, por su calidez y su capacidad para mantener la temperatura dentro de la casa rústica. A la hora de elegir el material para suelos o techos, recuerda que para dar a tu salón un toque mucho más auténtico es preferible elegir maderas con acabados prácticamente en bruto, con los nudos, vetas e imperfecciones a la vista, que darán un estilo con mucho carácter.
3. Escoge un sofá que invite a pasar horas en él
El salón suele ser el lugar de la casa donde más socializamos con familia y amigos, por esta razón debe de ser acogedor y un lugar que invite a relajarse. El estilo del sofá puede tener un diseño más actual o tradicional, todo depende del efecto que se desee conseguir, decóralo con cojines de texturas naturales y unas mantas de borrego para la sensación de hogar y de calidez.
4. Añade alfombras para ese efecto “cozy”
Con una o varias alfombras gruesas de pelo, puedes conseguir que la zona de sofás tenga un aire más relajado y apetecible. Son perfectas para el estilo rústico y en verano se pueden sustituir perfectamente por otras de fibras naturales que sean algo más frescas.
5. Escoge piezas artesanales
Olvida los muebles con acabados perfectos y sin historia, en el estilo rústico las piezas antiguas tienen todo el protagonismo. Decora tu salón rústico con muebles hechos con cariño: jarrones de cerámica artesanales, una mesa antigua con acabado desgastado, sillas de hierro y piezas hechas a mano de esas que pasan de generación en generación.
6. Respeta los elementos arquitectónicos
Si tu casa tiene vigas originales o paredes de ladrillo visto, ¡no las cubras! Son todo un tesoro y harán que tu decoración rústica sea mucho más original y única.
7. Detalles si, pero sin recargar
El estilo rústico no es minimalista, pero tampoco recargado. No añadas demasiados elementos decorativos, colores, o recargues las paredes con papeles pintados que distraigan la atención, sobre todo si quieres decorar un salón rústico pequeño. Menos es más, siempre será mejor apostar por una decoración más elegante y simple, con menos piezas, pero que destaquen y aporten personalidad que tener una que te abrume y haga que el espacio sea aún más pequeño.
8. Los mejores colores para un salón rústico
La paleta de colores de este estilo debe evocar y recordar a la naturaleza de los bosques, a las casas de campo y cabañas. Utiliza como base el blanco, para aportar luminosidad en las paredes y añade muebles de madera y otros elementos decorativos en colores marrones, verdes, azules, beiges y tonos tostados.
Si buscas un estilo menos clásico puedes apostar por el color en ciertas piezas de estilo vintage, por ejemplo, busca un armario restaurado (o hazlo tu mismo), una estantería o una mesa de centro de tonos rosas, naranjas, verdes pastel… Puedes dar un estilo más rústico chic si empleas notas de color que hagan que tu salón tenga un poco de chispa y color.
Si combinamos paredes blancas con toques en madera en vigas u otros elementos estructurales, junto con el equilibrio perfecto de muebles vistosos y otros más simples, unas contraventanas originales y un sofá con cojines de diferentes texturas y colores, puedes conseguir decorar salones rústicos con encanto y personalidad.
9. La piedra o la madera para vestir las paredes y techos
El ladrillo visto, la piedra o listones de madera pueden aportan a las paredes de tu salón rústico un plus en originalidad y estilo. No trates de ocultar lo orgánico, poténcialo y sácale el máximo partido. Una pared original en un salón puede hacer que el ambiente cambie por completo y le dará un look más rústico y hogareño.
No siempre es posible recuperar una pared original, pero si te encanta este acabado hay formas de conseguirlo sin la necesidad de empezar una obra o hacer que el espacio sea más pequeño al crear una pared falsa de ladrillo o piedra. Existen paneles de materiales sintéticos que imitan estos revestimientos y que se instalan directamente sobre la pared, consiguiendo el efecto que buscas y dando un toque mucho más cálido y acogedor, ideales para decorar un salón rústico.
10. La chimenea como foco principal de salones rústicos
Los salones rústicos tienen unas vigas espectaculares, mucha madera, sofás de ensueño, mantas de borrego y por supuesto ¡chimenea! Un salón rústico con chimenea te permite disfrutar del calor de las brasas en un ambiente totalmente acogedor y de ensueño.
Es cierto que no en todas las casas es posible que haya una chimenea, pero si tienes la gran suerte de tener una, conviértela en la protagonista de tu salón rústico, porque solo su presencia hace que se respire a campo y aporta un toque con mucho encanto.
Si está revestida de piedra o madera, crearás un look rústico al estilo más clásico. Pero también puedes añadir opciones un poco más modernas, como por ejemplo con una chimenea de cristal o una de metal en color negro. Una chimenea encendida en invierno puede ser de lo más acogedor. Y cuando se acerquen los meses de más calurosos puedes decórala con unas velas o con unas cestas de mimbre con flores, ¡el resultado es asombroso! Por supuesto también funciona estupendamente dejar a la vista los troncos de madera cortados, bien colocados en unos cestos o creando un efecto de pared de troncos, colocándolos unos encima de otros justo al lado de la chimenea.
¡Atrévete con un salón rústico!
Si te han encantado todos nuestros consejos para decorar un salón rústico, no te pierdas todas las propuestas de Westwing para conseguir resultados únicos en tu hogar ¿te las vas a perder? ¡Sigue leyendo y prepárate para sorprenderte!