Wabi Sabi: la filosofía oriental con beneficios para tu decoración

Se habla del ‘estilo Wabi Sabi’, pero en realidad el Wabi Sabi es mucho más que un estilo de decoración. Se trata de toda una filosofía de vida que conlleva un modo muy particular de entender la decoración. Una manera de ver el mundo y de considerar la imperfección como belleza, llegada desde el lejano Oriente, con enriquecedoras enseñanzas. ¿Tu casa tiene wabi-sabi?

¿Qué es Wabi Sabi?

El término Wabi Sabi no solo es intraducible, sino que también es indefinible en la cultura japonesa. Se trata de una filosofía, una manera de vivir y percibir el mundo, muy arraigada en Japón, cuyos orígenes datan de la dinastía Song en China (920-1279). De ahí se transmitió al budismo zen hasta llegar a nuestros días, con especial importancia en la cultura nipona.

Wabi podría significar, a grandes rasgos, “la elegante belleza de la humilde simplicidad”, y sabi, “el paso del tiempo y el subsiguiente deterioro”. En definitiva, destacar la belleza de lo imperfecto y el respeto por las huellas dejadas por el paso de los años en las cosas.

Así pues, más que un estilo decorativo, el Wabi Sabi es una filosofía de vida que aboga por valores muy positivos, como el reciclaje, darle una segunda oportunidad y valor a lo viejo, rendir tributo a la naturaleza y aceptar el paso del tiempo como un regalo, ¡porque nada es perfecto!

Menos es más

Vivir de forma imperfecta: ¡así se hace!

Esta tendencia popular va de la mano de otros estilos de hogar populares como el slow living, el hygge o el lagom. Se trata de centrarse en lo esencial. El lema es “calidad en vez de cantidad”. Con esto se quiere decir que no hay que buscar la perfección. Al contrario. En lugar de la simetría y la perfección, la asimetría y la naturalidad dan a la casa más carácter y autenticidad. Pero en comparación con los estilos de vida minimalistas, esta tendencia apunta aún más a la originalidad de las cosas. Se permite que los materiales sean toscos, que las formas sean extrañas y que los muebles sean viejos

Las 10 claves de la estética Wabi Sabi

Ahora que ya sabemos de dónde viene y qué significa Wabi Sabi, pongámonos prácticos. Si te identificas con esta filosofía zen y quieres introducirla en tu vida y en tu casa, aquí están las claves de este estilo de moda:

Simplicidad: los ambientes Wabi Sabi destacan por su sencillez. Nada de espacios recargados, sino que las estancias se decoran con mimo, mediante piezas únicas muy bien seleccionadas por su calidad. De madera, fibras vegetales y cerámica; elementos artesanales, hechos a mano, con sus imperfecciones y, precisamente por ello, especiales y bellos.
Autenticidad: si quieres una casa Wabi Sabi, visita anticuarios y rastros en busca de tesoros antiguos, con alma, auténticos. La historia que hay en estos objetos imprimirá carácter a tus espacios.
Orden: una casa ordenada transmite serenidad, una de las máximas de la filosofía Wabi Sabi. Una óptima organización de tu hogar comportará confort y traquilidad.
Asimetría: pero ojo, orden en el Wabi Sabi no quiere decir simetría. Más bien lo contrario. Este estilo logra el equilibro a través de lo simple, pero no con series de objetos en perfecta proporción y colocación.
Colores neutros y naturales: huye de colores estridentes y apuesta por blancos, arenas, gris piedra, verde olivo… tonos que te transporten a la naturaleza.
Naturalidad: incorpora elementos naturales a tu decoración, tales como ramas de eucalipto, baldas de madera natural, textiles como el lino, yute o el algodón, suelos de barro, un lavamanos de piedra rugosa y una vajilla de bambú. Lo sintético y demasiada tecnología es cero Wabi Sabi.
Imperfección: los ambientes Wabi Sabi se definen por ser perfectamente imperfectos. Objetos donde el tiempo haya depositado marcas, como grietas u oxidación, son bienvenidos y celebrados.
Minimalismo: no podemos pasar por alto los orígenes de esta filosofía y como buena estética japonesa, el menos es más se impone. Amuebla con lo indispensable.
Comodidad: todo ello persigue el objetivo de que te sientas cómodo en tu refugio. Alejado de todo tipo de ruido y estrés. Uno de los principales beneficios del Wabi Sabi es vivir en calma.
Suavidad: no persigas que todo esté liso y bien pulido: madera decapada, paredes y muebles con textura, tejidos rugosos y gustosos… ¡la arruga es bella para el Wabi Sabi! Las líneas rectas se reemplazan por las curvas. Contornos redondeados, para aportar confort y dulzura al espacio.

Con todo esto, lograrás un ambiente íntimo, modesto, asimétrico e imperfecto. Un ambiente Wabi Sabi.

Sigue leyendo: descubre otra filosofía de vida que puedes aplicar a tu decoración: el Feng Shui.

Objetos ‘muy Wabi Sabi’

Si te ha gustado esta corriente, anímate a introducirla en casa con estos objetos:

Un espejo antiguo con marcas
Una cómoda sin decapar
Ramos de flores silvestres
Jarrones y cerámica artesanal
Suelos de madera, barro, piedra… sin pulir
Textiles de hogar orgánicos de lino, algodón o yute
Alfombras y lámparas de fibras naturales
Menaje de cocina de madera o bambú (cero plástico)
Una pieza de anticuario o rastro

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